Antes del nacimiento de Eli Thompson, su padre expresó en broma su esperanza de que su hijo no heredara su propia apariencia. Sin embargo, momentos después del nacimiento del bebé, el ambiente en la habitación se volvió solemne y lleno de preocupación. Brandi McGlathery, la madre del bebé, inmediatamente sintió que algo andaba mal.
Ella dijo: “Volví y exclamé: ‘¡Algo anda mal!'”. El médico respondió: “No, está perfectamente sano”. Inmediatamente exclamé: “¡Le falta nariz!”.
Eli Thompson nació en 2015 con arhinia congénita, una afección en la que no se forman las fosas nasales, las fosas nasales o los senos paranasales. Esta es una enfermedad muy poco común. Según McGlathery, el 4 de marzo en un Ьаг en Mobile, Alabama, Eli Thompson comenzó a inhalar por los labios.
Dijo que su falta de hocico “no le molestaba en absoluto”.
5 días después de ser admitido en la unidad de cuidados intensivos neonatales del hospital Children’s & Women’s, Brandi McGlathery informa que el bebé se sometió a una traqueotomía.
“Las enfermeras aquí y en la Casa Ronald McDonald han ido más allá”, comentó. “La enfermera de la cápsula visita a su ‘amante’ para un chequeo”. Ella desarrolló una atracción por él.
Ella respondió, señalando la cuna de su hijo dormido: “Creemos que es genial tal como es”.
“Nos abstendremos de tocarlo a menos que solicite una nariz”. “Debemos tomar cada día como viene”.
Según la madre de Eli, antes de que sus fosas nasales puedan reconstruirse quirúrgicamente, debe alcanzar la pubertad. Ella dijo que evitará que él se someta a tratamientos cosméticos superfluos hasta entonces.
Trágicamente, el niño de 2 años falleció en el centro médico de Mobile Spring Hill. El padre de Eli, Jeremy Finch, publicó en Facebook: “Perdimos a nuestro amiguito anoche”.
Aunque Finch declaró que nunca entenderán por qué sucedió esto, agregó que fue “muy afortunado de haber tenido un hijo tan maravilloso en su vida. Completó su sentencia mucho antes de lo esperado, pero era el momento de Dios para traerlo a casa”.