El vuelvepiedras es un ave migratoria pequeña y robusta que se encuentra en las zonas costeras de todo el mundo. Su nombre científico es Arenaria interpres.
El vuelvepiedra tiene un plumaje estampado distintivo, con un dorso marrón moteado, un patrón de alas blanco y negro y un pecho rojo herrumbroso brillante. Tiene un pico corto y robusto y patas fuertes con pies palmeados. Estas adaptaciones le permiten moverse rápida y fácilmente entre las rocas y guijarros de la zona intermareal, donde se alimenta de pequeños invertebrados como cangrejos, moluscos e insectos.
El vuelvepiedras es conocido por su hábito de voltear piedras y conchas con su pico para descubrir presas ocultas. También son conocidos por su agilidad y velocidad, capaces de esquivar las olas y moverse rápidamente sobre superficies rocosas. En la temporada de reproducción, los vuelvepiedras migran a la tundra ártica para reproducirse y criar a sus crías.
El vuelvepiedras es un ave resistente y adaptable, y no se considera amenazado. Sin embargo, la pérdida de hábitat y la perturbación humana de los sitios de anidación pueden tener impactos negativos en las poblaciones locales.