Nos cautivan los pájaros comunes y pequeños. Nuestra atención permanece fija en ellos, incluso cuando encarnan la esencia de la infancia en sus disfraces. Su transformación es tan impecable que trascienden su identidad aviar y casi parecen poseer habilidades psíquicas. Es como si mantuvieran una conexión inherente con los corazones de muchos de los que los encuentran.
Entre estas aves de alas extendidas se encuentra el pico ancho de cola larga. Sus plumas están adornadas con un tono verde luminoso, mientras que su rostro tiene una tez de color amarillo sol con manchas amarillas rodeando sus ojos. Actualmente, adorna un tocado que recuerda a un casco negro coronado con un delicado encaje. Este mismo tocado se extiende en una cascada que se asemeja tanto al cabello como a la cola, creando un rostro de resplandeciente elegancia que podría compararse con piedras preciosas.
Por el contrario, los juveniles carecen del pelaje resplandeciente del que hacen alarde sus homólogos adultos. Sus colas son más cortas, sus cabezas más verdes y su plumaje general más tenue en comparación.
El pico ancho de cola larga, una especie no migratoria, encuentra su refugio en la región del Himalaya, Myanmar, el sudeste asiático, la península malaya, Sumatra y Borneo. Su hábitat preferido comprende bosques frondosos, arroyos balbuceantes y ríos sinuosos, que abarcan bosques de tierras bajas tropicales y subtropicales, así como las alturas brumosas de las montañas tropicales y subtropicales.
La ubicuidad de esta especie le confiere la ventaja de contar con una población estable, un detalle tranquilizador ya que se encuentra ausente de la lista de preocupaciones de la Lista Roja de especies amenazadas de la UICN.
Si bien su dieta principal consiste en insectos diminutos, estas aves ocasionalmente se deleitan con un festín de ranas, bayas y frutas suculentas, siempre que la despensa de la naturaleza les ofrece estas delicias cercanas.
A medida que se acerca la temporada de reproducción, la hembra de pico ancho de cola larga se dedica a crear un nido espacioso con forma de pera. Construido con delicada delicadeza, el nido incorpora una variedad de materiales, incluidas raíces finas, hojas marchitas, enredaderas y musgo. Ubicada de forma segura en una rama elevada, procede a poner una nidada de seis huevos dentro de su creación. Con determinación inquebrantable, ella cuida su preciado cargamento, supervisando su incubación y alimentando incansablemente a las crías hasta que alcanzan la grandeza de la madurez total.
Si esta encantadora ave encuentra un lugar en su corazón, considere compartir este artículo con sus queridos amigos y familiares. Por lo tanto, la maravilla del pico ancho de cola larga puede afectar las vidas de sus seres queridos.